¡Atención, fanáticos de la guitarra! El artículo en sí no estaría mal: los materiales son buenos y las regulaciones que permite hacer son adecuadas, pero hay un problema importante que revela una ingeniería superficial y que compromete su correcto funcionamiento o uso. La estructura, colocada debajo del sistema de resortes, es demasiado gruesa, y los tornillos que la fijan al cuerpo añaden aún más grosor. El resultado es que, una vez instalados los resortes, estos casi entran en contacto con los pequeños tornillos y generan ruidos inaceptables incluso cuando no se utiliza el trémolo. Cuando se acciona el puente y los resortes se estiran, estos se acercan al cuerpo y golpean contra los tornillos, desviando incluso su recorrido. Si lo compraron simplemente para bloquear un puente flotante, probablemente resuelvan el problema colocando una fina capa de espuma entre los resortes y la cubierta que los protege, amortiguando ese zumbido. Sin embargo, si planean usar el puente, definitivamente necesitarán modificar la pieza, fresando la entrada de los tornillos para crear espacio para sus cabezas de manera que, una vez atornillados por completo, queden al ras con la estructura. Una alternativa podría ser reemplazar el bloque del puente con uno al menos 4 o 5 milímetros más largo... pero deben asegurarse de tener suficiente espacio y de que esto no interfiera con la tapa que cubre los resortes. Obviamente, esto implica un costo adicional, siempre y cuando encuentren una medida que se ajuste perfectamente.